La nueva era de control de datos en salas de control de trabajo distribuido
Las cada vez mayores necesidades de este tipo de instalaciones en entornos de seguridad y vigilancia convierten la distribución de datos, según el análisis de Marcos Fernández, director de Christie para España y Portugal, en un asunto complejo y en constante evolución.
Los cambios experimentados en la actualidad por fuentes, señales y redes audiovisuales, así como la necesidad de adaptar los sistemas a esos cambios es una preocupación cada vez más latente que afecta especialmente a las salas de control que albergan equipos con operadores distribuidos, en diferentes ubicaciones en uno o varios edificios, y en una sola población o separados geográficamente.
El desafío no está únicamente en recolectar y gestionar datos procedentes de gran cantidad de fuentes, sino también en compartir datos entre lugares distintos, de forma que sea posible trabajar de manera colaborativa en torno a la misma información.
¿Cómo consigue una sala de control recibir datos originados en todo tipo de formatos y desde múltiples fuentes para servírselos después -con facilidad y eficacia, en un formato de fácil manejo-, a operadores situados en diversos emplazamientos?
Recogida y control de datos
Los datos se originan en formatos diversos; pueden llegar directamente por cable usando una señal continua, o ser accesibles dentro de una red mediante distintos protocolos de aplicación. Últimamente hay una demanda creciente, no sólo de acceder de forma sencilla al visionado de fuentes multimedia y de red, sino de gestionar el contenido en la propia pantalla usando un teclado y un ratón.
Entre otras, analizamos a continuación fuentes de contenido de uso habitual a tener en cuenta a la hora de fijar las necesidades de distribución, control y presentación de datos en una sala de control.
Fuentes audiovisuales
El vídeo es una fuente habitual de datos, pero también el audio puede resultar útil a los operadores en este tipo de entornos.
La introducción del vídeo 4K o de la ultra alta definición (UHD) ha incrementado la resolución de esas fuentes audiovisuales, de manera que ahora es posible aceptar contenido fuente en resoluciones de hasta 3.840×2.160p para presentaciones en sistemas de visualización de salas de control.
Fuentes de red
Las herramientas de software de captura de escritorio ofrecen un método económico para transportar y controlar fuentes de datos/gráficos de movimiento lento en una red ya existente. Los protocolos habituales de captura de pantalla están disponibles en aplicaciones de código abierto, de software en red y en sistemas operativos de uso generalizado, y son también compatibles con el control mediante teclado y ratón de la máquina fuente.
El recurso a cámaras IP ha proliferado también en muchas aplicaciones, sobre todo en las de seguridad y vigilancia. El estándar de compresión H.264 es omnipresente en cámaras IP, codificadores AV y sistemas IPTV. Los procesadores de vídeo deben adaptarse al uso de protocolos habituales y de plataformas de envío y difusión unicast o multicast.
Los sistemas para descodificar cámaras IP deben, asimismo, ofrecer la posibilidad de hacer interfaz eficazmente con miles de cámaras o de seleccionar contenido desde este tipo de dispositivos.
Sistema para la sala de control actual
Además de los distintos tipos de fuente, las necesidades de escalabilidad, seguridad, integración y facilidad de uso influyen también en el diseño del sistema de la sala de control.
Empresas y organismos que manejan procesos de alto valor, servicios esenciales o de seguridad pública suelen distribuir datos a un gran número de departamentos, estableciendo colaboración en tiempo real entre diferentes oficinas, edificios o campus o salvando grandes distancias geográficas.
A veces se precisa presentar datos compartidos en uno o muchos videowalls para dar apoyo a distintas funciones organizativas, o en pantallas de digital signage distribuidas por la empresa, facultad u organización.
Las redes IP constituyen una plataforma atractiva para distribuir fuentes de datos AV en operaciones de sala de control. En una organización, las redes llegan a todas partes, pero algunos segmentos de la misma pueden estar protegidos por firewalls y aplicaciones de seguridad, o restringidos para su uso en transporte unicast en lugar de multicast, popular en aplicaciones de distribución.
Un sistema que transporte vídeo y audio por una red en tiempo real debe proporcionar escalabilidad al llevar contenido a un gran número de displays y operadores finales, extendiéndola también a lo largo de segmentos que presenten restricciones más sofisticadas al transporte, como el encriptado o el realizado únicamente por unicast.
Para que un sistema de control de sala sea integrado, de fácil uso, flexible escalable y seguro, ha de cumplir los siguientes requisitos:
- Ser compatible con formatos múltiples de vídeo, audio y control.
- Ofrecer la posibilidad de establecer interfaz con servidores de aplicación basados en red o aplicaciones de captura de escritorio.
- Ser ampliable con el paso del tiempo o poder gestionar más fuentes y displays, así como transmitir datos a nuevas ubicaciones.
- Tiene que disponer de un método eficiente para distribuir contenido a pantallas y ubicaciones.
- Proporcionar una configuración e interfaz de control fáciles de usar.
Marcos Fernández
Director de Christie para España y Portugal
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• Sección: Control de sistemas, DESTACADO PRINCIPAL, Seguridad urbana, Servicios, Tribunas, Videovigilancia