Alemania confía en las cámaras Panomera para cumplir con las normas de protección

El fabricante alemán Dallmeier ha integrado el escudo de protección ‘privacy shield’ en sus cámaras de videovigilancia Panomera para garantizar la libertad de reunión en las ciudades alemanas.

El Tribunal Administrativo Superior del Estado de Renania del Norte-Westfalia (NRW) emitió el año pasado la decisión, citando el artículo 8 de la Constitución alemana (Grundgesetz): en el caso de las reuniones pacíficas, los sistemas de videovigilancia de posición fija para todos los participantes deben ser desactivados de manera que sean visibles a distancia.

Desde entonces, un número cada vez mayor de ciudades alemanas ha instalado cámaras Panomera con ‘obturador de protección de datos’ del fabricante alemán de tecnología de vídeo Dallmeier, para ofrecer “la máxima protección de los derechos individuales por un coste mínimo”.

Desde que se aprobó la normativa, los operadores alemanes de cámaras de vídeo fijas instaladas en zonas públicas están obligados a desactivarlas durante las reuniones públicas “de forma visible a distancia”, cuyo objetivo es eliminar el efecto intimidatorio o disuasorio sobre los participantes en la reunión.

Sin embargo, el procedimiento convencional para la desactivación obvia de la videovigilancia -generalmente colocando una cobertura con un saco de arpillera- supone una considerable carga logística y financiera adicional para el municipio.

Teniendo en cuenta que en una gran ciudad se celebran de media de más de doscientas asambleas de este tipo al año, el gasto adicional se eleva considerablemente.

‘Persiana de protección de datos’

Para garantizar la libertad de reunión a un coste razonable, el número de ciudades alemanas que han confiado en Panomera privacy shield de Dallmeier asciende ya a doce, entre ellas Colonia, Fráncfort del Meno, Offenbach y Darmstadt.

Fabricado con un material especial no transparente y coloreado en amarillo brillante, el obturador oscurece las lentes de los sistemas de cámaras Panomera en pocos instantes con un clic del ratón. Un icono impreso en el obturador muestra de forma inequívoca y de forma claramente visible desde la distancia: ‘Aquí no se realiza videovigilancia’.

Cuando la manifestación o el mitin ha terminado, la policía y la dirección de seguridad pueden anular la medida de protección en cuestión de segundos desde el centro de control.

“No estamos directamente obligados por la sentencia de NRW -explica Peter Weigand, director de la Oficina de Orden Público de Offenbach-, pero no podemos ignorarla y es mejor estar preparados, ya que una acción similar puede tener posiblemente una perspectiva de éxito también contra nosotros”.

Como apunta este responsable, “no sólo nos interesa satisfacer los requisitos legales, sino que lo más importante y principal es ofrecer a nuestros ciudadanos la posibilidad de ejercer su derecho básico a la libertad de reunión sin interferencias. El ‘escudo de privacidad’ nos permite hacerlo por control remoto, y sin ningún coste adicional de personal”.

Frank Salder, director general de Dallmeier en Gladbeck y experto en Safe City en la compañía, añade que “como fabricante alemán de tecnología de videoseguridad era importante armonizar las ventajas de la videovigilancia urbana con respecto a los focos de delincuencia con la legislación vigente en materia de protección de datos. Gracias a Panomera privacy shield, los ciudadanos tienen esta garantía, visible a distancia, al tiempo que los ayuntamientos se ahorran importantes costes en comparación con las soluciones convencionales”.

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