Cómo seleccionar tarjetas de almacenamiento para cámaras de videovigilancia
En el mercado hay una gran variedad de tarjetas microSD para la captura de vídeo en edge de la red. Dado el papel que desempeñan en un entorno de videovigilancia es fundamental elegir la más adecuada. Ziv Paz, de Western Digital, explica en esta tribuna cuales son los elementos que hay que tener en cuenta.
Con el aumento de las demandas de seguridad y protección a nivel mundial, sumado al apoyo de los avances en cámaras IP y en tecnología de cámaras 360 grados, la industria de la videovigilancia está en constante crecimiento. La investigación de mercado realizada indica que se espera que esta industria mundial alcanzará unos 39,3 billones de dólares en ingresos en 2023, impulsada por una CAGR (Tasa Anual Compuesta de Crecimiento) del 9,3% de 2018 a 2023.
La videovigilancia no consiste solo en capturar imágenes (para supervisar un evento o un incidente cuando ocurre), sino que también analiza los datos que ofrece, proporcionando información procesable que puede mejorar la eficiencia operativa, comprender mejor el comportamiento de compra de los clientes o simplemente proporcionar valor añadido e inteligencia a los negocios.
Para garantizar que la calidad de los datos sea lo suficientemente buena como para extraer los detalles necesarios para aprovechar la información que proporcionan, las cámaras de vigilancia también han evolucionado tecnológicamente, no solo con las capacidades ampliadas que rodean el zoom óptico y el rango de movimiento, sino también con mejoras del ratio señal – ruido (S2N), sensibilidad a la luz (y la iluminación mínima necesaria para obtener imágenes utilizables), rangos dinámicos amplios (WDR) para variar los requisitos de iluminación de primer plano y de fondo, y por supuesto, resoluciones de mayor calidad.
Por ello se espera que las cámaras en red compatibles con 4K Ultra HD crezcan del 0,4% en 2017 al 28% en 2021, lo que representa un asombroso crecimiento del 170% anual y requerirá de tres a seis veces el espacio de almacenamiento de vídeo 1080p dependiendo de la tecnología de compresión utilizada.
Las cámaras de vigilancia generalmente están conectadas a una grabadora de video en red (NVR), que actúa como una puerta de enlace o un servidor local, recolectando datos de las cámaras y ejecutando el software de administración de vídeo (VMS), así como los análisis de los datos. La captura de esta información depende de la ruta de comunicación entre las cámaras individuales y el NVR. Si se pierde esta conexión, ya sea de forma intencional o no intencional, o debido a un mal funcionamiento, no se capturará el vídeo y el sistema deja de realizar sus operaciones.
Por este motivo, se ha hecho común el uso de tarjetas microSD en cámaras de vigilancia como un mecanismo a prueba de errores. A pesar de la pérdida de conectividad con el NVR, la cámara puede grabar y capturar imágenes en bruto localmente hasta que se restaure la red, lo que en sí podría llevar mucho tiempo dependiendo del personal de mantenimiento o de la disponibilidad del equipo, las condiciones climáticas u otros imprevistos. Dado que las tarjetas microSD desempeñan un papel fundamental como mecanismo de seguridad para garantizar la disponibilidad del servicio, es importante elegir la tarjeta más adecuada para la captura de secuencias de vídeo.
Características clave a tener en cuenta
Hay muchas tarjetas microSD diferentes entre las que elegir para la captura de vídeo en edge de la red, ya que van desde capacidades de nivel industrial hasta nivel comercial o minorista, y todas las que se encuentran en el medio. Para ayudar a despejar algunas de estas dudas, estas son las características clave que una tarjeta microSD debe tener para la captura en videocámaras.
- Diseñada para vigilancia:
A medida que el mercado experimenta un crecimiento constante, los proveedores de almacenamiento quieren participar de este crecimiento y lo han hecho con una serie de tarjetas microSD readaptadas, reempaquetadas y reorientadas para la videovigilancia, pero sin mucha fiabilidad, rendimiento o capacidades específicas para este uso.
Al añadir la ausencia de especificaciones de tiempo medio entre errores (MTBF) a la ecuación, la fiabilidad de la tarjeta microSD generalmente es una medición percibida (medida en horas de operación) como relativamente vaga y oculta bajo métricas asociadas con la resolución de la cámara y la relación de compresión. Por lo tanto, al seleccionar una tarjeta microSD para cámaras de vigilancia en edge, la elección debe incluir un proveedor que sea fiable, tenga experiencia y una cartera avalada de almacenamiento en videovigilancia y en tecnologías de tarjetas microSD.
- Alta Resistencia:
La resistencia, en lo que se refiere a las tarjetas microSD, representa el número de reescrituras (ciclos de programa/borrado) que son posibles antes de que la tarjeta ya no pueda almacenar datos correctamente. La operación de reescritura es cíclica por lo que una nueva secuencia de grabación reemplaza el contenido anterior al escribir sobre él hasta que la tarjeta se llena y el ciclo se repite.
Cuanto mayor sea la resistencia, mayor será el rendimiento de la tarjeta antes de que deba ser reemplazada. La resistencia también se mide en terabytes escritos (TBW) o en el número de horas que la tarjeta puede registrar de forma continua (mientras se sobrescriben los datos) antes de que ocurra un error.
- Monitorización de estado:
La monitorización de estado es una capacidad deseable que actualmente no muchas tarjetas microSD admiten y que permite que el sistema host verifique si los niveles de resistencia de una tarjeta son bajos y debe ser reemplazada. Tener una tarjeta que soporte esta capacidad permite a los integradores de sistemas y operadores tener la capacidad de realizar un mantenimiento preventivo que ayudará a reducir los errores del sistema, así como los costes de mantenimiento asociados.
- Rendimiento:
Para capturar flujos continuos de grabación en bruto, las tarjetas microSD dentro de cámaras de vigilancia realizan operaciones de escritura entre el 70/90% del tiempo, mientras que la lectura del metraje capturado se realiza entre el 10/30%.
La diferencia en el rendimiento de lectura/escritura depende de si la tarjeta se utiliza en una cámara con inteligencia artificial (IA) o una estándar. Encontrar una tarjeta que sea apta para escritura y pueda proporcionar suficiente ancho de banda para capturar adecuadamente los datos transmitidos y sea rentable, requiere que se encuentre entre las capacidades de tarjetas industriales rápidas y las comerciales más lentas.
Un ancho de banda en el rango de 50 MB/sg para escrituras y 80 MB/sg para lecturas es el habitual y suficiente para tarjetas microSD utilizadas dentro de cámaras de vigilancia.
- Rangos de temperatura:
Puesto que las tarjetas microSD deben diseñarse para un funcionamiento continuo en condiciones climáticas extremas y en gran una variedad de climas, tanto si se encuentran en interior o exterior, que sea compatible con varios rangos de temperatura es otra característica a tener en cuenta.
Dado el amplio espectro de temperaturas requerido por los fabricantes de cámaras, las tarjetas microSD implementadas dentro de las cámaras de vigilancia deberían soportar rangos de temperatura de -25º Celsius a 85º Celsius, o en casos extremos, incluso hasta -40º Celsius.
- Capacidad:
También es muy importante seleccionar la capacidad correcta, ya que debe tener un nivel mínimo para garantizar que haya espacio suficiente para almacenar el material durante varios días o semanas antes de que se sobrescriba o se restaure la conectividad con el NVR.
Aunque 64 GB se consideran la capacidad óptima para las tarjetas microSD instaladas en las cámaras de vigilancia actuales, la capacidad de 32 GB puede ser apta en instalaciones de videovigilancia más modestas o de nivel más básico. En el futuro, serán importantes incluso mayores capacidades para casos de uso específicos y se convertirán en capacidades estándar a medida que el mercado evolucione.
Al elegir la tarjeta microSD de almacenamiento adecuada para implementar en su sistema de videovigilancia, hay que asegurarse que esté diseñada específicamente para esta aplicación: que incluye los niveles adecuados de resistencia y rendimiento para capturar flujos continuos, puede soportar desafíos ambientales y un rango amplio de temperatura y permite mantenimiento preventivo para proporcionar años de servicio.
Es fundamental que el sistema de vigilancia pueda recopilar secuencias de vídeo tanto si la cámara está conectada a un NVR como si se trata de una cámara independiente, ya que la recolección de imágenes en la base del sistema de vigilancia es el punto de error más crucial. Por tanto, se requieren mecanismos a prueba de errores para mantener la grabación de la cámara hasta que se restaure la red.
Ziv Paz
Director de Marketing de Producto, Soluciones Embebidas e Integradas de Western Digital
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